Este debería ser sin la más remota duda, un año festivo para nuestro país, se celebran los 200 años de nuestra emancipación de la metrópoli española, la liberación del yugo cultural con que España nos tenia sometidos, es la mayor fiesta que un país, que un pueblo debería tener .
Son 200 años de nuestra libertad, aunque no sepamos precisar con palabras que es exactamente la libertad, que envuelve lo tan mágico e indescriptible.
El país debería estar forrado en tricolor, los habitantes más que nunca deberían sentirse hondamente paraguayos, sentir nuestra cultura en la sangre que circula en cada una de nuestras arterias, pero sin embargo, pareciera ser todo lo contrario, el centro esta opaco las personas son las mismas de siempre, parecen ausentes.
No es para menos, es en verdad muy difícil vivir en Paraguay. Es difícil y es triste, es un país tan sufrido, no creo en el destino, (pero si es que existiese) a nuestro país le ha tocado uno de los más trágicos. Después de la guerra grande, fue difícil la recuperación del pueblo, las posteriores revoluciones, los endeudamientos, otra guerra, la dictadura (que nos robo nuevamente la libertad hasta que pudimos recuperarla) los desparecidos, el dolor del exilio, una revolución en marzo. Y con todo esto estamos aquí.
Somos un pueblo resistente, que lleva con dignidad el dolor de su patria, pero todos esperamos un futuro mejor, con las esperanzas de que las cosas algún dia mejoraran. De que llegara el momento en el que el país tenga gobernadores justos y honestos, aun estamos esperando ansiosos por ellos.
El presidente Lugo representaba el cambio y un poco de esperanza pero resulto ser un engaño, la decepción mas grande para todos aquellos que le confiaron su voto, se, no es fácil cambiar 50 años en tan solo tres, es cierto, su gobierno posee logros, pero las cosas que de verdad deberían de cambiar siguen igual, y se están convirtiendo en un cáncer para el país.
Paraguay festejo su centenario de independencia en medio de revoluciones y guerras civiles, sumido en una cuasi anarquía, a 100 años después estamos festejando el bicentenario entre espirales y mosquiteros, tratando de zafar de la influenza y la tuberculosis, añorando gobernantes menos egoístas, procurando que tanta impunidad no nos ahogue, deseando un transporte público digno y una vida un poco mejor.
No sé si cambiaron mucho las cosas de hace cien años atrás, no lo sé, el bicentenario es un gran farsa, nadie lo siente, no es más que “PLATA JE`U” y un poco de arreglo para los principales sitios turísticos de Asunción (que siempre deberían estar arreglados).
Esperemos que sean capaces de arreglar el centro en una semana, que encuentren mas fotos de personajes que llevaron la cultura de nuestro país al exterior, y que siempre estuvieron en el olvido para poder reconocerlos solo este mes, retratarlos en la parte trasera de un bus y para que después vuelvan a perderse, y por sobre todo ojala que los extranjeros crean que nos preparamos con todo para estos festejos.
Feliz aniversario Paraguay!! no me queda mas que desearle larga vida a la Patria que libre nunca fue…
No hay comentarios:
Publicar un comentario